Definición de Biodiversidad y Megadiversidad

La biodiversidad, también definida como diversidad biológica, es el término empleado para expresar la condición y el grado de variedad de seres vivos (animales, plantas, hongos, microorganismos) que existen en un lugar determinado. Está comprendida por:

· Diversidad genética: consiste en la variación de información hereditaria dentro y entre poblaciones de organismos. La base de esta diferenciación se encuentra a nivel molecular en los cromosomas de cada individuo, los cuales contienen información genética distinta de otros en su ADN. Es este material, el que les permite a las especies responder rápida y eficazmente a los cambios de su entorno (condiciones climatológicas y variaciones en el hábitat), desarrollando así, características especiales que le permiten evolucionar en nuevas especies. Este proceso se desarrolla en un periodo muy largo, lento y continuo, en el cual el cambio drástico de las condiciones ambientales, como por ejemplo, el impacto de las actividades humanas, puede generar que las especies de una región no logren adaptarse, por lo tanto intenten migrar a otras zonas, o de otro modo, disminuyen a tal punto de la extinción. El ser humano ha domesticado plantas y animales por largo tiempo con el desarrollo de la agricultura, la ganadería y la forestería, y en esta actividad, al seleccionarlas y reproducirlas siguiendo determinadas características, ha logrado dar origen a formas, razas y variedades domésticas de nuestro uso y consumo diario, o industrial.

· Diversidad de especies: se refiere a la “riqueza de especies”, es decir, en el número de especies diferentes de seres vivos que existe en un área determinado. El planeta Tierra concentra en la actualidad una taza de biodiversidad altísima: se han registrado 1,7 millones de especies de seres vivos (entre plantas, animales y microorganismos), pero se calcula que existan entre 5 y 100 millones. La distribución global de esta diversidad depende de tres factores fundamentales: los grandientes latitudinales (a menor latitud, es mayor la cercanía a la línea ecuatorial, y por lo tanto el número de especies es mayor, mientras que a mayor latitud, en cercanía a los polos, la riqueza de especies disminuye), los grandientes de altitud (la diversidad disminuye generalmente con la altura), y los grandientes de precipitación (las zonas donde la lluvia es más abundante, como los bosques o selvas, son más diversas que las zonas desérticas y áridas).

· Diversidad de ecosistemas: consiste en la distribución espacial de distintos ambientes (terrestres y acuáticos) de un país o región, éstos albergan a las especies y a sus poblaciones en comunidades animales y vegetales, y en hábitats. Para poder mapear la distribución de éstos, es necesario atribuir términos de clasificación, tales como comunidad, hábitat, ecosistema, bioma, reino, dominio, y ecorregión, los cuales agrupan básicamente por la identificación de características físicas del área y las especies que posee, estableciéndose en una jerarquía. El poder clasificar estos ambientes ecológicos tiene una gran importancia que no sólo se queda a nivel teórico, sino que tiene un fuerte fundamento para el manejo y la conservación de la biósfera.

La Megadiverdidad es aquella condición o apelativo que se les atribuye únicamente a aquellos países que juntos territorialmente abarcan más del 70 % de la diversidad biológica de todo el planeta.